¡La pregunta del millón!

Quienes llegaron a intimar a la parte que debe pagar sin resultado alguno, y hasta han agotado la vía «amistosa» del llamado telefónico al estudio jurídico que la representa, se encuentran a menudo ante un callejón sin salida.

Sobre todo si la condenada en costas es una empresa que seguramente tiene una cuenta con saldo al que se pueda echar mano a través de un embargo.

Lamentablemente esa información forma parte del secreto bancario que rige en el país y por lo tanto no existe un lugar al que se pueda acudir para averiguar donde una persona o empresa tiene una cuenta. Ni los sitios de información crediticia aportan estos datos.

Hace unos años era frecuente que los juzgados, a pedido del interesado, libraran un oficio al Banco Central para que éste lo informe. Sin embargo, dicha entidad no daba la información directamente sino que giraba el oficio a todos los bancos del país y éstos eran los que aportaban la información -ya sea positiva o negativa- al expediente.

Como consecuencia de esto los expedientes se llenaban de contestaciones de oficios de bancos y entidades financieras de todo el país.

Por este motivo los jueces son ahora reacios a acceder a librar dicho oficio.

No hay forma entonces de acceder a esa información directamente. Por eso, sugiero:

1) En todo cobro extrajudicial donde reciban un cheque de una aseguradora, tomar nota del banco ya que nunca se sabe si en otro caso no tendrán que embargar.

2) Hablar mucho del tema con otros colegas, ya que a otros les pueda haber ocurrido que hayan recibido cheques de quien ahora nos debe pagar o que hayan tenido que embargar a esa misma empresa o aseguradora.